miércoles, 14 de mayo de 2014

Control del crecimiento y desarrollo del niño

La Alimentación es necesaria en todos los seres vivos, tanto en los animales como en los Seres Humanos, y es por ello que debemos tener una equilibrada incorporación de nutrientes a nuestro organismo, lo que muchas veces es referenciado como Buena Alimentación, siendo fundamental su cumplimiento para el desarrollo de la vida y de las distintas actividades cotidianas.

ALIMENTACIÓN SALUDABLE



Una buena alimentación debe adecuarse a la edad, sexo, peso, talla y actividad física e intelectual de cada persona. Se debe considerar también el clima y los estados especiales como embarazos, lactancia, enfermedades, etc.
El cuerpo humano puede compararse con una máquina que está siempre realizando complejas actividades, por lo que una alimentación equilibrada es el mejor combustible para mantener una buena salud.

RECOMENDACIONES PARA UNA ALIMENTACIÓN CORRECTA1.

Incluir al menos un alimento de cada grupo en cada una de las tres principales comidas del día.
2. Comer la mayor variedad posible de alimentos:
Muchas verduras y frutas, en lo posible crudas y con cáscara, preferir las de temporada que son más baratas y de mejor calidad. Con moderación cereales (tortilla, pan integral, pastas y galletas, arroz o avena), combinados con leguminosas (frijoles, lentejas, habas o garbanzos).
Pocos alimentos de origen animal, preferir el pescado o el pollo sin piel a las carnes de cerdo, borrego o res.
3. Comer de acuerdo con las necesidades y condiciones individuales. Ni de más ni de menos.
4. Consumir lo menos posible de grasas, aceites, azúcar y sal.
5. Beber agua pura en abundancia.
6. Realizar 30 minutos de actividad física al día.

LOS GRUPOS DE ALIMENTOS


Los alimentos son vehículo de los nutrimentos, es decir, le permiten al ser humano obtener las sustancias que necesita para llevar a cabo sus funciones vitales.

Aunque la oferta de alimentos cambia de un país a otro y de una cultura a otra, por lo general es rica en variedad y esto es importante porque una dieta variada asegura el consumo de los nutrimentos que el organismo necesita.
Bajo este concepto, la combinación adecuada y suficiente de por lo menos un alimento de cada grupo en cada comida, es la manera de obtener una alimentación saludable.
De acuerdo a los nutrientes que aportan los alimentos, se les clasifica en tres grupos.

1) Verduras y frutas: Aportan principalmente agua, fibra, vitaminas (antioxidantes) y minerales. Cereales: Aportan energía.
2) Leguminosas y alimentos de origen animal: Aportan proteínas, hierro, grasas y vitaminas.
3) Cada uno de los grupos tiene la misma importancia, ya que cada uno proporciona sustancias distintas que son indispensables para el mantenimiento de las funciones del cuerpo.



¿PARA QUÉ SIRVEN LOS NUTRIENTES?


Las proteínasSon sustancias nutritivas que construyen, mantienen y reparan el organismo. Son fundamentales para crecer y estudiar. Cumplen en nuestro cuerpo una función parecida a los ladrillos en una construcción.
Los carbohidratosSon sustancias que proporcionan calorías. Dan la energía necesaria al cuerpo para mantenerse a cierta temperatura, moverse y desarrollar trabajos.
Las grasasSon un concentrado de energía, es decir, proporcionan caloría en gran cantidad y transportan en nuestro organismo las vitaminas A,D,E y K. Son a la vez vehículo y combustible.
Las vitaminasEllas armonizan y regulan el funcionamiento de todo el organismo. Se parecen a la chispa que enciende el motor de un automóvil.
Los mineralesCumplen funciones parecidas a las vitaminas, además forman parte de estructuras vitales del organismo: esqueleto, dientes, glóbulos rojos, etc.
El aguaEs un nutriente fundamental, pues es el medio de transporte de los alimentos a la sangre.



VITAMINAS


Las vitaminas son como ladrillos de una construcción, las usamos para el crecimiento, además producen anticuerpos. Son necesarias para el equilibrio del metabolismo. No son energéticas. Las más importantes son:  VITAMINA A:Mantiene saludable la piel y las mucosas. Fuentes principales de alimentos: hígado, leche, crema, queso, huevos y verduras (acelga, espinaca, berro, lechuga, zanahoria, tomate etc.).

VITAMINA B1:Normaliza el apetito y la digestión. Interviene en el crecimiento normal del niño. Mantiene el tejido de glándulas, piel, cabello, uñas y mucosas. Interviene en el funcionamiento del sistema nervioso. No se puede almacenar en el organismo, por eso deben consumirse con regularidad.
Alimentos ricos en vitaminas B1 son: cereales en granos, germen de trigo, carne magra de cerdo, hígado, papas, yema de huevo, queso, vegetales verdes y amarillos y en la frutas como lechosa, zanahorias, ahuyama, guayaba y mango.
VITAMINA B2:Ayuda a la organización de las células, conserva la piel suave y la visión clara. Contribuye a mantener la normalidad de los tejidos. Indispensable para el crecimiento normal. Desempeña un papel importante para la utilización de la energía y las proteínas. Forma parte de las enzimas, fermentos que intervienen en los proceso de respiración de los tejidos. Alimentos donde están: la leche, los huevos, los riñones, el hígado, hojas comestibles (las espinacas), queso, carnes.
VITAMINA C:Participa en la formación de las sustancias que unen las células. Indispensable para la utilización de ciertos derivados de las proteínas. Necesaria para la formación del colágeno, proteína que necesita entre otras cosas para que las heridas puedan cicatrizar. Se pueden obtener a través de: mangos, semeruco, fresa, melón, naranja, lechosa, guayaba, limón, tomate y hojas comestibles.




¿PODEMOS SUSTITUIR ALIMENTOS DE ALTO COSTO?


Algunos si, otros son irreemplazables.
La leche o sus derivados debemos consumirlos todos los días según lo indicado en las recomendaciones alimentarias (edad, estado de salud, etc.)
La carne de vacuno es reemplazable por todos los tipos de carne existentes: pollo, conejo, pescado, mariscos, vísceras.
Los huevos de gallina tienen proteínas. Son un aporte alternativo a las carnes.
Como muchas veces no podemos consumir carne, porque su precio es alto, podemos reemplazar con la mezcla de la legumbres y cereales. Por ejemplo, frijoles con arroz, lentejas con avena, etc.
Las frutas y hortalizas no se pueden reemplazar fácilmente. Como es frecuente que suban de precio en invierno, recomendamos cultivar un huerto en el patio de la casa y también secar fruta en el verano, cuando hay abundancia.
Los cereales integrales ricos en fibra, vitaminas y sales minerales pueden reemplazar en parte a las frutas. Esto lo recomendamos hacer cuando dispongamos de pocos recursos para hacer un menú variado. Es importante saber que los cereales con cáscara o integrales pueden irritar el intestino si se consumen en exceso.
En cuanto a los aceites, debemos elegir los de origen vegetales porque son más sanos, no tienen colesterol. No podemos sustituir fácilmente una aceite de buena calidad.


ACTIVATE


Fuera del trabajo, algunas actitudes simples como caminar, cambiar el elevador por las escaleras, pasear en bicicleta o salir a bailar, son acciones fáciles que, si son practicadas con frecuencia, también ayudan al cuerpo a mantenerse saludable y en forma.
Practica actividades físicas diariamente, mínimo 30 minutos a lo largo del día. Ellas contribuyen con una serie de beneficios para el organismo:
  • Aumento de la sensación en el estado físico y emocional.
  • Elevación de autoestima.
  • Mejora del sistema cardiovascular y circulación sanguínea.
  • Estímulo a la producción del colesterol bueno (HDL).
  • Reducción de los niveles del colesterol malo (LDL).
  • Disminución de la ansiedad y del estrés.




Alimentación infantil 


Es una etapa de crecimiento más lento y estable, en la que los niños ganan una media de 2 kilos de peso, y de 5 a 6 cm. de talla, al año.
En esta etapa los niños desarrollan una gran actividad física, por la que su gasto energético aumentará considerablemente, y por lo que deberá adaptar su consumo de calorias, a la nueva realidad.
Desde el punto de vista del desarrollo psicomotor, el niño ha alcanzado un nivel que le permite una correcta manipulación de los utensilios empleados durante las comidas, siendo capaz de usarlos para llevar los alimentos a la boca.
Una de las características específicas de esa edad es el rechazo a los alimentos nuevos por el temor a lo desconocido.
Se trata de una parte normal del proceso madurativo en el aprendizaje de la alimentación, lo que no debe ser traducido por la falta de apetito.
El niño preescolar puede reconocer y elegir los alimentos al igual que el adulto. Normalmente, el niño tiende a comer lo que ve comer a sus padres y a otras personas que le acompañan.
Ellos observan e imitan también en la alimentación. En la escuela, ese proceso se ampliará, y el niño adquirirá hábitos nuevos debido a las influencias externas.

Modelos de dieta del preescolar


Normalmente, un niño de esa etapa debe consumir, en media, 1.600 calorías, siendo 50% de carbohidratos, 31% de lípidos y un 18% de proteínas. En el cuadro abajo, presentamos tres ejemplos de dieta para niños preescolares:  


Desayuno
Media mañana
Comida
Merienda
Cena
200 ml. de leche
30 gr. de galletas
Un vaso de leche
30 gr. de pan
10 gr. de margarina
Lentejas estofadas
o en puré
Un yogur
30 gr. de pan
30 gr. de jamón cocido
Puré de patatas
Palitos de pescado
Un vaso de leche
200 ml. de leche
40 gr. de cereales
30 gr. de galletas
1 quesito (20 gr.)
Puré de verduras
Albóndigas
30 gr. de pan
40 gr. de queso fresco
200 ml. de zumo
Sopa de fideos 
Pollo con almendras
Un vaso de leche
Un yogur
30 gr. de galletas
Zumo de frutas
200 ml. de zumo
de naranja
Espaguetis con tomate
100 gr. de lenguado
a la romana
250 ml. de leche
30 gr. de bizcochos
Sopa de pan
Buñuelos de bacalao
con ensalada
Un vaso de leche
















































Control del crecimiento y desarrollo del niño

Los niños crecen y se desarrollan adecuadamente si están sanos, se alimentan de acuerdo a sus requerimientos y se encuentran en un ambiente de protección y amor.

Una de las maneras de asegurar el crecimiento y desarrollo adecuado en los niños es realizar controles frecuentes con personal calificado, que puede identificar problemas de forma oportuna y alentar a los padres o cuidadores.

Se llama crecimiento al aumento de talla y de peso del niño. Desarrollo es el proceso de organización y maduración de las diferentes capacidades, tales como moverse, pensar, experimentar sentimientos, relacionarse y comunicarse con los otros.

Durante la consulta médica, el profesional valorará al niño en su peso, talla, estado nutricional y realizará un examen físico completo; evaluará su desarrollo, identificará signos de peligro y compartirá con padres y cuidadores indicaciones que mejoren la calidad de vida del niño y su familia.

Es importante recalcar que los padres son los primeros agentes de salud. En especial la madre, es quien, en primera instancia decide sobre la salud familiar, quien está o no está enfermo, qué tratamiento (natural o farmacológico) necesita, se encarga de administrarlo y vigila todo el proceso salud-enfermedad. Por esto se dice que la madre es la primera médica y la primera maestra.
Por lo tanto, para que usted tenga una idea más precisa del crecimiento de su hijo/hija, ingrese a nuestra página web, donde pondrá encontrar las curvas de crecimiento de la OMS y la respectiva calculadora

  

Modelo de dieta para el niño preescolar

En esta etapa de la vida, su niño debe consumir, entre 1400 y 1600 calorías, distribuidas de la siguiente manera:

La alimentación debe repartirse en 5 comidas diarias: 3 comidas principales y 2 refrigerios.


Comidas principales:


Desayuno:
Es una de las comidas más importantes del día. Debe cubrir el 25% de las necesidades nutricionales diarias. Si un niño no desayuna, no tendrá suficiente energía; su salud y desempeño intelectual serán deficientes.
Un desayuno adecuado debe incluir:
- productos lácteos (vaso de leche, yogur, o ración de queso)
- cereales, galletas o tostadas
- frutas (en pieza entera o en jugo).
Es necesario variar el tipo de desayuno para que el niño no se canse de comer siempre lo mismo y aprenda a comer de todo un poco.

Almuerzo: Constituye aproximadamente el 30% de las necesidades nutricionales.
Puede estar compuesto por dos platos o por un plato único.
Se debe incluir alimentos de todos los grupos:
- cereales y tubérculos (pan, pasta, arroz ó papas)
- verduras
- alimentos proteicos (carne, pescado, huevo)
- fruta
- lácteos

Cena:
Los grupos de alimentos que se pueden preparar para la cena son los que se han citado para la comida, aunque conviene variarlos para que el niño tenga variedad y los acepte fácilmente.
Antes de llevar al niño a dormir se le puede ofrecer un vaso de leche o un yogur.

Refrigerios: Entre las comidas principales se dará 2 refrigerios al niño: uno por la mañana y el otro por la tarde.
Es importante proporcionar alimentos de calidad como frutas (en pedazos, jugos o ensaladas sin azúcar), galletas de cereales o lácteos.

Se puede mezclar leche con frutas y/o cereales para preparar coladas o refrescos pero sin añadir azúcar.

Luego de cada comida, incluso el vaso de leche o yogur antes de dormir, el niño debe lavarse los dientes.


Porciones

En el siguiente cuadro se resumen las porciones que el niño debe consumir al día durante sus cinco comidas:


El niño/La niña necesita tomar la leche

Hasta los 2 años de edad el niño debe recibir leche materna que representa la mejor leche para el crecimiento y desarrollo del niño. A los 2 años, se puede seguir con el  amamantamiento, pero en caso que se acabe la lactancia materna, es importante proporcionar leche de vaca y lácteos en cantidad. Los lácteos son fuentes de proteínas y de calcio, esenciales para el crecimiento y desarrollo del niño.
Las proteínas son esenciales para formar, mantener y reparar los órganos y tejidos del cuerpo y para que pueda funcionar correctamente.
El calcio es esencial para que los huesos crezcan y se mantengan sanos y firmes.


  

Sobre los líquidos y el agua

A veces se piensa que los niños no requieren tomar mucha agua. Todo lo contrario, por su actividad física los niños requieren de aproximadamente un litro y medio para cubrir sus necesidades y procesar los alimentos. Esta cantidad puede administrarse como jugos naturales, leche o como agua bien hervida.


Que alimentos evitar

  • Dulces, en exceso
  • Bebidas gaseosas, gelatina, jugos procesados y otros alimentos muy azucarados
  • Alimentos grasosos, frituras y comida chatarra
  • Café, té
  • Dosificar la cantidad de sal
  • Mayonesa, salsa de tomate procesada
  • Condimentos fuertes
  • Tener mucho cuidado con las pepas de las frutas y con alimentos “pequeños”, como arvejas y frutos secos por el riesgo de atragantamiento
  • No de a su niño o a cualquier miembro de su familia alimentos comprados en la calle de dudosa procedencia
  • Evite el exceso de hidratos de carbono y grasa, porque el niño obeso de hoy es el adulto enfermo de mañana.


Buenos hábitos alimentarios

En esta época de la vida, empiezan a crearse hábitos alimentarios saludables, que repercutirán en los siguientes años. Estos hábitos se ven influenciados fundamentalmente por el medio que rodea al niño: su familia, amigos, vecinos o centro infantil.

Aquí algunas sugerencias que crearán buenos hábitos alimentarios:
1.- Hay que crear un ambiente favorable durante la comida, un ambiente positivo, tranquilo, libre de tensiones, peleas o gritos. La alimentación no sólo es física, sin también espiritual y los niños perciben esto muy bien.
2.- Es preferible que el niño se reúna con la familia u otros niños durante las comidas. Esto crea un ambiente positivo de sociabilidad y apoyo. Al observar, el niño aprende por imitación de las personas que lo acompañan.
3.- El niño debe tener su sitio en la mesa, su silla y su vajilla propia. Insistir a que el niño coma sentado y no corriendo alrededor de la mesa, para evitar atragantamiento y fomentar buenos hábitos.
4.- Se debe evitar comer con la televisión o con juguetes en la mesa que puedan distraer al niño. En la hora de la comida hay que comer, y en la de los juegos que jugar.
5.- Es importante establecer y mantener claramente los horarios de comidas y organizados en desayuno, refrigerio, almuerzo, refrigerio y cena. Tampoco no se debe ser estricto e inflexible, a tal punto que el horario vuelva a la comida un suplicio. Más bien, esta regularidad debe ser parte del entrenamiento práctico sobre normas sociales y responsabilidades para el niño.
6.- Otros hábitos, como lavarse las manos antes de comer, agradecer por los alimentos, esperar que todos empiecen deben estimularse.
7.- Uno de los grandes problemas que las familias enfrentan es la disminución de apetito e interés por alimentos a partir de los tres años más o menos. Para afrontar esta situación se debe tener mucha constancia y paciencia en las horas de la comida. No se debe alimentar al niño con apuro o brusquedad. Además el “picoteo” de comida chatarra entre las comidas quita el apetito, por lo tanto no dar “chucherías” entre las comidas, peor aún como recompensa.
El niño va a ir aprendiendo a desarrollar sus preferencias y gustos en cuanto a sabores, olores y texturas. Para ello se le ofrecerá una gran variedad de alimentos. Una presentación atractiva de los nuevos alimentos facilitará que el niño los acepte. Si los rechaza es mejor no obligarle a que se los coma, y pasado un tiempo se probará de nuevo a dárselos en pequeñas cantidades para que se anime a comerlos. La reiteración es la manera más eficaz para conseguir que el niño coma de todo, pero siempre respetando, en la medida de lo posible, las preferencias y rechazos del niño.
8.- Tanto los centros de estimulación temprana (antes llamados guarderías) y la escuela pueden convertirse en excelentes sitios de experiencia en relación a la comida, porque el proceso de socialización a través de la alimentación se amplía y se adquiere nuevos hábitos, que se esperan sean los correctos. Esto último depende del régimen alimentario escolar, que debe ser organizado y vigilado por personal calificado.
9.- Cuando prepare los alimentos tenga cuidado en la higiene. Lávese las manos frecuentemente. Siempre lave las verduras y frutas. Utilice agua hervida para cualquier preparación y utensilios limpios.
10.-  Si en ocasiones el niño tiene menos ganas de comer no se le debe forzar a hacerlo, pero hay que vigilar esta inapetencia.